El 2024 aparece muy propicio para la recuperación del mercado habitacional. A la recuperación que ya se ha iniciado en el segmento de vivienda no social, como lo atestigua el incremento de los créditos hipotecarios dirigidos a este segmento, se suma la muy posible reactivación del segmento de vivienda social, en razón de que un Decreto de Urgencia ha dispuesto la asignación de los recursos adicionales para el financiamiento del Bono del Buen Pagador – BBP del crédito Mivivienda. En total, se dispone este año de 2,498 millones de soles en subsidios, lo que permitirá promover casi 77 mil viviendas de interés social (66mil en zonas urbanas), lo que implicaría duplicar la producción de VIS del año 2023 y facilitar una inversión total (ahorros + bonos + créditos) de 6,300 millones de soles, lo que equivale aproximadamente al 12% del PBI de la construcción. Cabe señalar que el 58% de esa inversión corresponde al crédito Mivivienda.
Se trata, sin duda, de un primer paso para asegurar la sostenibilidad de los programas habitacionales del Estado, que deben procurar la construcción de alrededor de 195 mil viviendas anuales en los próximos veinte años para atender el déficit de arrastre y la demanda de vivienda de los nuevos hogares que se formen en nuestro país de aquí al 2043. Para evitar que, en el futuro, se vuelva a cortar el flujo de recursos para la vivienda, para CAPECO es indispensable contar con una Ley de Financiamiento Habitacional.
Cabe señalar que, el déficit actual de vivienda bordea el millón ochocientas mil unidades, de las cuales 500 mil son viviendas faltantes (déficit cuantitativo) y 1 millón 300 mil constituyen el déficit cualitativo (unidades que carecen de servicios públicos, son construidas con materiales precarios o son demasiado pequeñas). De otro lado, cada año se forman 150 mil nuevos hogares por año, de los cuales el 70% se proveerán informalmente de vivienda, si se mantienen las tendencias actuales.
Si se quiere reducir la producción informal a 20%, se deben construir 1.44 millones para atender el díficit de arrastre y 2.4 millones para atender la nueva demanda habitacional.
En la anterior edición del IEC, CAPECO formuló una propuesta integral para la atención de esta demanda de vivienda, a la que denominó la estrategia de las 6 “s”: suelo, servicios públicos, simplificación administrativa, subsidios y créditos, sostenibilidad y seguridad en la construcción.
La reciente discusión pública entre el Ministerio de Vivienda y la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento – SUNASS, a propósito de la Ley de Acceso Universal al Agua, hace necesario profundizar sobre las condiciones en que se brindan estos servicios en nuestro país y promover la articulación de las inversiones que se efectúan para cerrar las “brechas” de acceso a ellos por parte de las familias de menores ingresos, con el objetivo de romper lo que CAPECO ha denominado “el círculo perverso del agua”.